9/5/07

Vergüenza televisiva

Hace unas semanas anuncié, en mi primer A la hoguera, dedicado a ese personaje repulsivo que es Dani Martín, cantante de El Canto del Loco, que Cuatro iba a degradarse estrenando una serie protagonizada por este grandísimo gilipollas. Pues bien: la serie se estrenó ayer y, para confirmar mi teoría de que iba a tener éxito, Cuenta atrás consiguió un share de casi el 19%, siendo el estreno más exitoso de la cadena, y siendo tan vista como House, que la precedió. Qué equivocación la mía al pensar que situarla después de esta genial serie era un error, que nos demostraba las pocas esperanzas que Cuatro tenía en ella; ha conseguido quedarse con buena parte de los que vieron al doctor, fijo.



Entre La que se avecina, que consiguió un horriblemente alto share en su estreno (28,3%, que por suerte descendió a 19 en sus dos siguientes emisiones, pero lamentablemente no suficiente para ser cancelada), Los Serrano, que han perdido el poco sentido que tuvieron en su día, Los hombres de Paco y esta bazofia subhumana, más que nada, y aunque no la he visto, porque ha plagiado descaradamente elementos de House y Perdidos (sí, efectivamente: en el avance vi que el Gilipollas y los suyos encuentran una escotilla, y hay un plano desde sus caras hasta el fondo. Patético) y porque el memo este ni puede ser cantante ni actor por el mismo motivo: porque no sabe hablar. Coño, no vocaliza. Parece que tenga un polvorón en la puta boca. Pues eso, que con todas estas mierdas, la ficción nacional decae a ritmo vertiginoso. A mí lo que más me jode es el recuerdo del maltrato y cancelación de Vientos de agua, aquella gran serie protagonizada por los Alterio. Tengo entendido que la nueva temporada de Génesis ha sido buena, pero no la he visto, porque en mi casa se ve Aída, de la que últimamente no se salva ni el niño afeminado. En fin.